Mágica nació en 2012, en Rosario, Argentina, como nacen las cosas más bellas: por amor.
Amor a las flores, sí. Pero sobre todo, amor a las personas. A su forma única de sentir, de celebrar, de habitar sus momentos más importantes.

En sus primeros años, se llamó Petite Marie. Y todo comenzó con una pasión: realzar la personalidad de nuestras amigas que se casaban. Queríamos que sus bodas hablaran de ellas, que se vieran y se sintieran auténticas. Así fue creciendo —de la mano de dos amigas— acompañando cientos de historias: bodas, familias, quinceañeras, editoriales y celebraciones llenas de alma.

Y entonces llegó esa boda: la de Antonela Roccuzzo y Lionel Messi. Un antes y un después. Una celebración inolvidable, donde estuvimos dejando nuestra huella en una historia que recorrió el mundo.

En 2019, Petite Marie se convirtió en Magica. Un nuevo nombre para lo que siempre fue: una manera de crear con intención, emoción y belleza. Después vino la pandemia. La vida cambió —y con ella, nuestros caminos.

Magica también se transformó. Hoy, sigue viva conmigo, del otro lado de la cordillera, en Santiago de Chile.

Con la misma sensibilidad de siempre, pero ahora también al servicio de marcas, nuevos relatos, nuevos escenarios.

Gracias por estar acá. Tal vez, esta sea la próxima historia que escribamos juntas.